Entrada destacada

El Gran Libro

El Libro Cuando nació la idea de escribir fue como la tormenta que de pronto aparece en el horizonte anunciando con relámpagos y truenos...

domingo, 15 de marzo de 2015

El Jardinero II

El jardinero  II
   El viejo jardinero dando gracias a Dios por otro día de vida, lleno sus pulmones del aire fresco de la mañana y se encamino a la pequeña bodega donde guardaban las herramientas para iniciar sus tareas.
   Admiraba la obra maestra que El Señor presentaba en el cielo, pintado con nubes y colores , luces y sombras meditando que los hombres diariamente recibimos regalos de Dios pero la mayoría de las veces no los apreciamos.  
   Empezó a regar el jardín, abrió los grifos y los aspersores lanzaron abanicos de agua sobre el césped, las flores y arbustos llenando de frescura el ambiente y de un olor a tierra y hierba mojada que siempre había gustado al viejo.  Tomo la escoba y empezó a barrer los caminos de piedra que serpenteaban por el lugar mientras admiraba cada árbol y planta que había plantado y cuidado hasta convertir ese lugar en uno de los jardines mas bonitos de la ciudad, sentía la enorme satisfacción de un padre amoroso que ve como sus hijos se han convertido en algo bueno y agradeció nuevamente a Dios la oportunidad de haber contribuido en su obra mientras repetía mentalmente,  “porque Tu que todo lo puedes me has permitido ser tu humilde servidor y me has regalado en la vida paz, felicidad y belleza, gracias Señor”


 Los vecinos que conocían a quien durante muchos años se había ocupado de mantener el sitio , decían que el jardinero no solamente era un buen trabajador, sino un buen hombre que siempre escuchaba con atención y daba respuestas relacionando analógicamente la vida de las personas con las de las plantas, no siempre se le comprendía, pero sus palabras proporcionaban tranquilidad y se notaba en su mirada la bondad y el deseo de que las cosas marcharan bien.
 Sus respuestas eran cortas, pero dejaban algo para reflexionar, sus consejos eran sencillos, pero tenían un profundo significado porque el viejo se guiaba  por la luz de su  espíritu , la fe en Dios.

    Pocos sabían que el jardinero había sido en sus años de juventud un hombre alocado que gustaba de las fiestas, las reuniones con los amigos, la conquista de las mujeres, los placeres vanos.  Mas tarde fue un hombre de negocios, empresario que logro cierto éxito pero no se acercaba a Dios.  Fue un accidente que lo postro en cama durante casi un año lo que le hizo reflexionar y encontrar el camino para sanar su alma, la recuperación fue increíble, nació nuevamente, un hombre nuevo surgió de la tragedia y sin proponérselo Dios marco el camino. Durante las terapias para recuperarse se aboco a cuidar de un pequeño terreno done empezó a cultivar flores y arbustos, sembró arboles y comprendió que la vida era un proceso divino en el que Dios le permitía participar y gozar de sus maravillas, “nunca mas” , se dijo a si mismo, dejare esta senda, porque en la vida sencilla he encontrado la paz y la felicidad que nunca tuve y he visto que Dios esta en cada detalle.
  A la vez que crecía su fe, fue aumentando el tamaño del terreno cultivado , fue así como tras de muchos años se había convertido en un hermoso sitio donde la gente gustaba pasear y descansar mientras él se transformaba en un hombre que amaba y respetaba al Señor.
 
   El oraba a toda hora, decía que eso le hacia sentir que bien, no porque Dios lo requiriera, sino porque su espíritu se llenaba de paz la contarle al Señor sus sentimientos, pensamientos y emociones, dando cuenta de sus acciones como un fiel servidor. 
   Se que El me escucha, que gusta de que haga bien las cosas y me hace feliz el servirle con toda mi energía y con verdadera vocación, porque me ha regalado demasiado, porque es generoso y conocedor de lo que ha sido, lo que es y lo que será.
  Una hoja del árbol se mueve por gracia de Dios, una tormenta riega en minutos la tierra por su bondad, llena ríos y lagos , hace que la cosecha sea abundante, que los frutos sean deliciosos, las flores hermosas y la vida continúe. 

  Es El quien cultiva y quien hace que la tierra de frutos, es quien dirige la obra en la que incluye al hombre, es quien marca el principio y final en su obra, por lo que tengo que agradecerle el haberme dado la oportunidad de participar.

  Unos jóvenes pasaron a su lado caminando apresuradamente con rumbo a la escuela, de pronto uno se detuvo, retorno a donde se encontraba el viejo jardinero y le pregunto ¿ de verdad cree que Dios puede atender a mas de seis millones de personas al mismo tiempo?   El jardinero levanto la vista y miro con al joven sonriendo y pregunto  ¿de verdad crees que en la red se pueden conectar y pasar información millones de ordenadores, celulares y Tablets?   El joven se retiro  corriendo mientras reía y gritaba   ¡Es cierto, Dios puede!

   Para el jardinero los misterios de la vida no era algo que tenia que resolver, indagar o causarle inquietud, porque los veía como algo que mantenía el interés de las personas y daban un toque enigmático e interesante.

 Hemos de ser un motivo de constante atención para Dios, somos impredecibles y hacemos cosas que pasan de lo absurdo a lo divino, de lo aberrante a la genialidad, creo que no le defraudamos porque en medio del caos que hemos formado, siempre buscamos su luz y no perdemos la esperanza de que ha de levantarnos cuando hemos caído.


El jardinero miro al cielo y dijo,  “el universo parece demasiado grande y complejo, pero Dios dio al hombre la capacidad de contenerlo en el reducido espacio de su mente, eso es grandioso!”
  En esos momentos paso a su lado la mujer que nunca respondía a su saludo, pero el jardinero dijo “ buenos días” con el mismo animo de siempre, ella lo ignoro como de costumbre. El jardinero simplemente sonrió mientras pensaba.
 Algunos no sentimos superiores y no entendemos que hasta un simple insecto puede terminar con nuestra vida, porque en verdad solo formamos parte de un conjunto increíble donde todo  se relaciona y cualquier cosas puede suceder.
 Sus pensamientos fueron interrumpidos por una mujer de serio aspecto, elegante y de mirada inteligente que le dijo:
-buenos días ¡ dispense que interrumpa su trabajo pero me preocupa que mi esposo no cree en los milagros, dice que la ciencia es la respuesta adecuada para cualquier cosa ,  ¿usted cree en los milagros?

 el jardinero dejo de remover la tierra en torno a un rosal, se irguió lentamente y le contesto:
Si no crees en los milagros, levántate temprano, observa el amanecer, mira como la luz va invadiendo el mundo, descubriendo los colores, las formas, haciendo que las sombras se disipen y todo tome sentido, eso es un milagro que se repite y tal vez por ello no lo apreciamos.  Otras veces los milagros no son lo que esperamos, sino lo que conviene y eso nos hace pensar que no es milagroso, pero si el universo continua funcionando y nosotros gozando de sus maravillas, eso es suficiente motivo para creer y hay algo mas increíble, los hombres muchas veces cooperamos para que un milagro suceda. 
  La mujer se retiro agradeciendo la atención , sorprendida que el jardinero hubiese descubierto que era ella la que dudaba de los milagros.

En otra ocasión el viejo podaba un arbusto cuando se acerco un hombre e inquiero ¿qué religión profesa?  Por su tono el jardinero adivino que venia con la intención de convencerlo de que perteneciera a una congregación determinada, se detuvo por un momento y contesto : La misma que usted o la de otras personas que creen en Dios y en su bondad, que comparten sus bienes, son tolerantes y aman a sus semejantes al punto de sacrificarse por su bienestar.    El hombre se despidió con una sonrisa y el viejo continuo su trabajo meditando:  mientras los líderes de cada religión continúen afirmando que son los verdaderos portadores de la palabra de Dios y que su doctrina es la única que puede llevar a sus seguidores a una vida de iluminación, eterna, donde solo han de disfrutar, no han de terminar los conflictos y la confusión.

   El temor ha sido uno de los pilares en la construcción de doctrinas que especulan con lo sagrado, la historia y sus ejemplos, la ciencia,  no han servido para alejar al hombre de las falsas creencias y hacerle notar que el universo contiene suficientes mensajes y misterios para que el hombre sienta agradecimiento por la vida y crea que existe un Dios que esta detrás de su funcionamiento. Cuando lo logremos, no habrá mas temores, se aceptar la vida con su gama de representaciones, con sus misterios, tragedias, incertidumbre y magnificencia, porque eso es lo que la hace tan valiosa.





  


No hay comentarios:

Publicar un comentario